La Impuntualidad Y Los Rasgos Psicológicos De Quienes Siempre Llegan Tarde
El profundizar en la personalidad de quienes realmente son incapaces de llegar a tiempo, es un elemento que encierra un contexto bastante amplio
Y uno de estos elementos es la falta o la nula disciplina que se tiene frente a las diversas actividades o compromisos que se adquieren en las distintas etapas de la vida
La impuntualidad es un rasgo de la personalidad sumamente marcado en quienes definitivamente no pueden ser puntuales, y es que, el no poder llegar a tiempo a una cita es algo que le puede ocurrir a cualquier individuo, pero cuando ello se convierte en una constante, las circunstancias tienden a formar parte de un sinnúmero de elementos que obedecen a los rasgos psicológicos de una persona determinada.
Por ello entonces es que el profundizar en la personalidad de quienes realmente son incapaces de llegar a tiempo, es un elemento que encierra un contexto bastante amplio, por lo que se hace necesario detallar cada uno de los factores que influyen en ello, y uno de estos elementos es la falta o la nula disciplina que se tiene frente a las diversas actividades o compromisos que se adquieren en las distintas etapas de la vida.
Dado que la disciplina que se adquiere en la infancia y se desarrolla a lo largo de la vida, termina convirtiéndose en el marco de todo cuanto se hace a lo largo de la misma, puesto que, estaríamos de acuerdo en que, la disciplina es la encargada de darle forma y fondo a todas y cada una de las actividades que se realizan, y es que la definición de disciplina hace referencia a la capacidad que adquieren las personas para poner en práctica una serie de principios relativos al orden y la constancia, tanto para la ejecución de tareas y actividades cotidianas, como en sus vidas en general, lo que claramente hace de quienes la practican personas sumamente puntuales.
Por ello entonces es que quienes no son disciplinados difícilmente pueden llegar a tiempo o puntuales a las diversas actividades en que están inscritos o sencillamente a las citas que deben asistir, o lo que refiere elementos un tanto más complejos, es que, quienes adolecen de disciplina pueden verse en dificultades para culminar las distintas actividades que comienzan, ejemplo de ello sería el no terminar una carrera universitaria o las distintas tareas o actividades que hacen parte del día a día.
Adicional a lo antes detallado otro de los componentes que hace referencia a los rasgos de la personalidad de quienes no pueden llegar puntuales a sus diversas actividades, es un componente netamente fisiológico, lo cual algunos psicólogos puntualizan o refieren con el hecho de ser una persona “matutina” o “vespertina” dado que ello puede tener inferencia en la impuntualidad. “En este sentido, se ha visto que las personas “vespertinas” tienden a ser más impuntuales que las “matutinas” (Werner et al., 2015).
Aunado a estos dos factores cabe mencionar que elementos como: aspectos psicológicos, situacionales, culturales, educativos y sociodemográficos o incluso referentes a la salud, pueden influenciar directamente en la impuntualidad de algunas personas.
Cabe mencionar que, algunos estudios revelan que las personas a las cuales se les complica llegar puntual de manera constante perciben el tiempo de una manera distinta a las personas que efectivamente llegan puntuales a todos lados, dado que, son múltiples los factores que interfieren en la manera en que cada persona percibe el tiempo.
Y es que el tiempo sin lugar a duda es un elemento absolutamente subjetivo, puesto que cada uno lo administra según sus propias circunstancias, ello es: según su edad, personalidad, estado de ánimo, aunado a ello algunos fármacos (si es el caso), la temperatura o los desórdenes psiquiátricos, en ello también intervienen las dificultades del día a día, lo que indica que cada persona tiene un tiempo interno, el cual está directamente relacionado al ritmo de vida de cada uno.
Es de resaltar que, no todas las personas que tienen dificultades para llegar a tiempo a sus compromisos responden a un único perfil, dado que los rasgos de dicha personalidad pueden verse como ya se expresó, influenciados por diferentes factores, ejemplo de ello sería entonces que, una persona impuntual, puede percibirlo de una manera completamente natural, dado que sus padres lo hicieron todo el tiempo y por ende esa es la cultura al interior de su hogar, otras personas indican que son impuntuales dado que, son despistados y por ende no tienen una percepción del tiempo, como la tendría una persona que esta alerta a su entorno constantemente.
Ahora bien, la impuntualidad de quienes están acostumbrados a llegar tarde a todos lados y por ende irrespetar el tiempo de los demás, están expuestos a acarrear constantemente con las consecuencias que ello trae consigo, dado que, si lo exponemos en un plano laboral claramente ello lo puede llevar a enfrentar reales dificultades frente a sus jefaturas, incluso a ser despedido dado que para un sin número de culturas al interior de las múltiples empresas, la impuntualidad es una falta grave.
Si aterrizamos la impuntualidad al plano familiar, ello también puede generar graves conflictos, puesto que la familia puede llegar a enfrentamientos, dado que, si uno de sus miembros es impuntual, claramente el resto de la familia se vera afectada por no poder cumplir el gran número de compromisos familiares, dado que uno de sus miembros no cumple los tiempos estipulados.
Y en el ámbito personal, la impuntualidad puede significar, no hacer las cosas que se quieren y deben hacer, o hacerlas tarde, hacerlas mal y no poder rendir adecuadamente, o disfrutar de ciertas actividades como lo hace quien está a tiempo siempre, lo que indica claramente que, el ser impuntual acarrea consecuencias negativas, aunado a ello, la impuntualidad genera efectos negativos sobre el concepto que tienen los demás de dicha persona y por ende el propio autoconcepto y el autoestima, lo que puede llevar a una disminución del bienestar psicológico.