Psicóloga Infantil: Tipos De Traumas Infantiles
Psicóloga Infantil: Los traumas por su naturaleza son netamente subjetivos, por ello entonces puede decirse que, pueden existir tantos traumas como quienes los padecen, ahora bien, la OMS expresa qué eventos pueden desencadenar un trauma por estrés postraumática, pero es claro que, una persona puede experimentar un trauma como respuesta a cualquier evento que encuentre física o emocionalmente amenazante o perjudicial para su vida.
Consejo de la Psicóloga Infantil: Por más difícil que parezca los traumas se deben afrontar, a fin de poder atacar el daño de raíz y poderlo cortar de tajo, tratarlo y procesarlo, los traumas por su naturaleza son eventos que han producido un fuerte impacto emocional
Pero si hacemos referencias específicamente a los traumas infantiles, tendríamos que destacar que, en los niños son más frecuentes ciertas circunstancias que les pueden ocasionar miedo, desasosiego, ansiedad, malestar, llanto, preocupación y zozobra entre otros, por ello puede hablarse de tipos de traumas, lo que permite agruparlos, por lo que a continuación, enlistaremos los tipos de traumas más comunes en la infancia, cabe resaltar que, de acuerdo a su permanencia y severidad se hace necesario tratarlos profesionalmente a fin de evitar secuelas en el potencial adulto.
Hablando con la Psicóloga Infantil
- El miedo: la infancia por lo general está acompañada de un sentimiento constante y común en casi todos los niños, que es la sensación de desprotección, por lo que podría decirse que, aún cuando no este necesariamente desprotegido, pueden ocurrir eventos que lo lleven a experimentar ese miedo; tal es el hecho de quedarse solo en casa, perderse por unos minutos en un centro comercial, estar al cuidado de personas que no conoce y estar solo en la oscuridad entre otros muchos eventos. Aquí lo verdaderamente relevante es la falta de respaldo, o la realidad del sentirse verdaderamente desprotegido. Claramente este tipo de circunstancias pueden hacer que se genere un temor excesivo a estas mismas situaciones, lo cual puede ir en aumento y convertirse con el tiempo en un miedo mucho mayor
- El rechazo: los seres humanos en la infancia desarrollan la auto estima, la cual está compuesta por la percepción que se comienza a tener de sí mismo y por supuesto de la valía que se le otorgue a esa percepción, por ello cuando se esta desarrollando esta percepción de sí mismo, se necesita indefectiblemente que las figuras referentes desde el respeto aprueben y acojan con amor esta personalidad naciente en la infancia, la cual sin duda tendrán que ayudar a moldear positivamente, dado que, acompañara a ese menor el resto de la vida, y de ello depende la valía en que se tenga ese ser humano en la edad adulta, cabe resaltar que, cuando el niño siente que es rechazado por estas figuras de referencia, se ve seriamente dañado, y si esta sensación de rechazo se produce reiteradamente, puede dar lugar a un serio trauma
- El abandono: el abandono es sin lugar a duda uno de los daños más grandes que puede recibir un menor directamente de sus padres, dado que en el diseño natural del seno familiar los niños y niñas no están programados emocionalmente para ser abandonados por sus padres, por lo que el daño es casi un trauma de entrada
- La humillación: la humillación en su generalidad es por derecha un ataque grave a la dignidad de la persona, lo cual genera un menoscabo en la auto estima, y por ende un sentimiento de vergüenza en quien asido agraviado, siendo además una de las circunstancias más difíciles de soportar, ahora bien, si estamos frente a un niño humillado, de manera constante por sus figuras referentes, puede generar en él, un trauma. En estos casos, no es raro que las secuelas den lugar a actitudes agresivas o despóticas hacia otras personas; con lo cual, el afectado intenta replicar esa misma conducta de humillación a otras personas para sentirse un tanto alivianado
- La traición: cuando un niño es traicionado, desarrolla sentimientos de deslealtad por parte de quien a generado dicha conducta, pero el caso se convierte en un detrimento mayúsculo cuando quien a generado dicha acción de deslealtad son sus padres o su circulo más cercano, este tipo de traumas, crean secuelas en la capacidad de confiar en otras personas y estrechar lazos afectivos. Estableciendo problemas de sociabilidad o, incluso, desórdenes emocionales graves.
- Maltrato y abuso: frente a el maltrato y el abuso podría decirse que es el más grave y dañino de los traumas con que tenga que lidiar un niño, si de por si es devastador en un adulto, imagine por un ínstate lo que puede provocar en un niño, las secuelas de estos traumas son tan graves que pueden llevar a quien las a soportado a replicar dichas conductas en otros seres humanos
Por más difícil que parezca los traumas se deben afrontar, a fin de poder atacar el daño de raíz y poderlo cortar de tajo, tratarlo y procesarlo, los traumas por su naturaleza son eventos que han producido un fuerte impacto emocional, por lo que se deben tratar con expertos, dado que no es el trauma en si lo que se debe subsanar, también se debe tener en alta valía las secuelas que dejan estos y así evitar los daños futuros.