Conducta Sexual
Cuando la conducta sexual transgrede la realidad y se transforman en un elemento casi que esencial de la vida, se pueden convertir en algo incontrolable y perjudicial
Los profesionales en conducta sexual están capacitados para ser comprensivos y discretos y lo que hablas con un médico o profesional de salud mental es confidencial
También conocida como conducta sexual compulsiva, a veces, recibe el nombre de «hipersexualidad», «trastorno de hipersexualidad» o «adicción al sexo».
Se define como un deseo constante y casi que excesivo por situaciones que refieren sexo o placer provocado por el mismo, ello se refleja en fantasías, impulsos o conductas sexuales muy difíciles de controlar, que exponen al individuo que las padece a situaciones de riesgo constante, afectando múltiples factores en su vida y entorno social tales como; la vida, la salud, la libertad, el derecho a un trabajo digno, la familia y por qué no el libre desarrollo de la personalidad, por mencionar algunos.
Cuando las conductas sexuales transgreden la realidad y se transforman en un elemento casi que esencial de la vida, se pueden convertir en algo incontrolable y perjudicial, no solo para el afectado directamente, sino también para quienes están a su alrededor.
Ejemplo de ello, puede ser elevar a su máxima y descontrolada expresión; la masturbación, el cibersexo, múltiples parejas sexuales, el consumo de pornografía o pagar por sexo. Ello entonces puede considerarse, conductas sexuales compulsivas.
Como ya se dijo antes lo realmente preocupante con la conducta sexual compulsiva, es que no solo daña o pone en riesgo a quien lo padece, sino que las personas tales como la familia y entorno social se ven expuestas con dichas conductas. Por ello la conducta sexual compulsiva que no se trata puede dañar y por qué no destruir vidas. Sin embargo, con tratamiento y autoayuda, se puede aprender a controlar dicha conducta.
También es importante mencionar que no todas las personas que padecen desordenes sexuales son conscientes de su patología, dado que, en ninguna circunstancia es fácil identificar situaciones que se entre cruzan con los gustos, sentimientos, emociones, preferencias e inclinaciones, puesto que, ello hace parte de la forma de ser única e irrepetible de cada ser humano, y cuando una patología se refleja o se camuflaje en el listado inmediatamente anterior no es tan fácil de auto identificarlo.
Es decir, estudios indican que el trastorno de la conducta sexual se puede deber a: un desequilibrio de las sustancias químicas naturales del cerebro, cambios en las vías cerebrales, Trastornos que afectan el cerebro. Y quien lo padece puede relacionarlo con un estado natural pero lejos de creer que refiere una situación clínica que debe ser tratada.
A continuación, enlistaremos algunos síntomas que pueden ayudar a identificar los trastornos sexuales y las luchas internas de quien lo padece:
- Impulsos sexuales intensos y recurrentes en los que se invierte gran parte del día, donde se suman fantasías constantes difíciles de controlar
- Se mantienen ciertas conductas sexuales que liberan adrenalina por unos instantes, pero a la vez existe un sentimiento de culpa que se debate constantemente en hacerlo de nuevo y lo antes posible, en otras palabras, sensación de culpa y la necesidad de repetir la conducta constantemente
- Si se tiene conciencia de la patología, puede existir una lucha constante entre controlar las fantasías, impulsos y conductas sexuales sin éxito
- Refugiarse en las conductas sexuales compulsivas para evadir la soledad, los problemas, la depresión, la ansiedad o el estrés
- Continuar teniendo conductas sexuales que tienen consecuencias graves, como la posibilidad de contraer o contagiar una infección de transmisión sexual, (exponer la vida y la salud no solo de quien lo padece sino también de quienes comparten con esa persona), la pérdida de relaciones importantes, problemas en el trabajo, complicaciones económicas o problemas legales (perdida de la libertad)
- Problemas para establecer y mantener relaciones saludables y estables
Factores de Riesgo
A pesar de que las causas de la conducta sexual compulsiva son inciertas, pueden comprender:
- Un desequilibrio de las sustancias químicas naturales del cerebro.Ciertas sustancias químicas del cerebro (neurotransmisores), como la serotonina, la dopamina y la norepinefrina, ayudan a regular el estado de ánimo. Estos niveles elevados pueden estar relacionados con la conducta sexual compulsiva.
- Cambios en las vías cerebrales.Como ocurre con otras adicciones, con el tiempo, se suele necesitar contenido y estimulación sexuales más intensivos para obtener satisfacción o alivio. Como adicción la conducta sexual compulsiva, con el paso del tiempo, podría provocar cambios en los circuitos neuronales del cerebro, especialmente en los centros de refuerzo del cerebro.
- Trastornos que afectan el cerebro.Ciertas enfermedades o problemas de salud, como la epilepsia y la demencia, pueden provocar daños a las partes del cerebro que controlan la conducta sexual. Además, el tratamiento de la enfermedad de Parkinson con algunos medicamentos agonistas de dopamina puede provocar conducta sexual compulsiva.
Factores de riesgo: aunque en los hombres puede ser más frecuente padecer trastorno sexual compulsivo, en las mujeres también se manifiesta sin cuidado de las inclinaciones sexuales de quien lo sobrelleva. Pero factores como: la facilidad de acceso a contenido sexual, la discreción y la privacidad de las actividades sexuales desmesuradas y disruptivas, pueden fomentar dichas desordenes conductuales. Además, un mayor riesgo de tener una conducta sexual compulsiva puede presentarse en personas con las siguientes características: problemas de abuso de drogas o alcohol, el trastorno del estado de ánimo (depresión o ansiedad) o la adicción al juego, conflictos familiares o miembros de la familia con problemas, como la adicción, antecedentes de abuso sexual o maltrato físico.
Lamentablemente la conducta sexual compulsiva puede tener muchas consecuencias negativas que como se ha reiterado a lo largo de este blog, afecta al directamente implicado por dicha patología, como a su entorno social más cercano, y es posible enfrentar situaciones adversas tales como
- vergüenza y baja autoestima “culpa”
- enfrentar y sobrellevar trastornos tales como: depresión, angustia intensa, ansiedad o suicidio
- dañar a los que más se amas
- exponer el trabajo dado que, se ocupa cualquier espacio en busca de pornografía
- por la compra de pornografía y el pago de servicios sexuales, oquear la economía
- contraer VIH, hepatitis u otra infección de transmisión sexual o contagiar una infección de transmisión sexual a otra persona
- consumo de sustancias no saludables,como el abuso de drogas recreativas o el consumo excesivo de alcohol
- delitos sexuales
Como prevenir esta conducta sexual
Como no se conocen las causas de la conducta sexual compulsiva, no está claro cómo se puede prevenir, pero existen algunas maneras de mantener esta conducta bajo control:
- Buscar ayuda lo antes posible, al Identificar y tratar los primeros síntomas puede ayudar a prevenir que la conducta sexual compulsiva, dado que esta empeora con el tiempo o se convierte en un espiral de vergüenza, problemas en las relaciones y actos que hacen daño.
- Buscar tratamiento pronto para los trastornos de salud mental.La conducta sexual compulsiva puede empeorar con la depresión o la ansiedad y terminar dañando lo que más se ama, o sumir hasta la destrucción
- Identificar problemas de alcoholismo y abuso de drogas, y buscar ayuda
- Evitar situaciones de riesgo. No pongas en peligro tu salud ni la de los demás exponiéndote a situaciones en las que te tentarás de participar en prácticas sexuales riesgosas
El buscar ayuda si se siente que se está perdiendo el control de la conducta sexual, especialmente si se siente que dicha conducta está ocasionando problemas en el individuo o entorno social, podría ser de gran ayuda, dado que, dicho trastorno con el tiempo empeora.
Si seguimos la línea de las adicciones, la patología sexual es una adicción y se deben tratar como tal, puesto que las adicciones no mejoran sin tratamiento de hecho empeoran, por ello lo más aconsejable es buscar ayuda en cuanto se logre tener una conciencia real del problema.
En dicho caso lo primero que debes hacer es dejar de lado la vergüenza, dado que entendemos que, esta patología es algo muy personal, por el contrario, debes pensar en el alivio que traerá a tu vida y a la de tus seres queridos el liberarte de esta afección, ten presente que, los profesionales de salud sexual están capacitados para ser comprensivos y discretos y lo que hablas con un médico o profesional de salud mental es confidencial.